
Hace ya varias semanas que acabé esta muñequita, pero hasta ahora no había llegado a su destino. No sé cuánto tiempo hace que descubrí por azar (o no) la página del Costurero Real. Como princesa medieval frustrada que soy (XD) me enamoré de los vestidos, las localizaciones, el estilismo.... me hubiera encantado por un dia ser yo la que se pusiera esos trajes! y como fotógrafa (con algo menos de frustración que lo de la princesa medieval... he podido desempeñar algo más el papel...), me encantó el retoque posterior de las imágenes. En fin... si alguna vez vendiendo amigurumis llego a tener dinero, sin duda caerán varios de estos vestidos, jejeje. El hecho es que es un sueño, una idea, un trabajo que me apasiona, sin más. Así que decidí hacerles un pequeño detalle. Quizás no puede compararse a nada de lo que construyen ellos, pero sí al menos contiene una parte muy importante de mí.
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